Cuando era pequeñita, vivía en un piso pequeño sin calefacción. Mi madre, se levantaba cada mañana y encendía una estufa con un pequeño colgador donde ponía nuestra ropa para que estuviera calentita cuando mi hermana y yo nos vistiéramos.
Preparaba los desayunos y los almuerzos y después nos despertaba. A veces, muy pocas, no daba tiempo a preparar el bocadillo, y entonces bajábamos a la tienda de la señora Primitiva que lo mismo vendía leche que pan que Tigretones. Cogíamos algo de almuerzo y le decíamos: “Adiós señora Primitiva, luego se lo paga mi madre“. Y eso bastaba para sacarlo de la tienda.
Antes aún, cuando mi madre era pequeña, se sabía el nombre de todas las vecinas de la calle, los niños eran criados por una comunidad en la que todo el mundo se conocía.
¿Han disminuido ahora nuestras relaciones sociales?
Compramos en grandes superficies y cada vez conocemos menos a nuestros vecinos, sin embargo, tenemos miles de amigos, seguidores y gente con la que conectar a través de las redes sociales. Eso debería bastar para tejer una red de amigos más grande que la de entonces, pero ¿sirven las redes sociales para hacer amigos o son más un lugar en el que odiar protegidos por el anonimato?

Cada vez que entro a twitter me quedo enganchada en una conversación llena de insultos y descalificaciones. En cuanto alguien dice algo con lo que otro no está de acuerdo comienzan las frases tipo: “bastante tiene este con no cagarse encima“, “anda ve y date una vuelta“, y otras lindezas.
No solo eso, sino que se ridiculizan los comportamientos de la gente constantemente. Si alguien me cae mal, a cada cosa que haga voy a sacarle punta. ¿Cuándo dejamos de seguir a nuestros amigos y empezamos a vigilar a nuestros enemigos a ver si metían la pata?
Por supuesto que en las redes sociales también hay gente amable, pero se ve que les damos menos bola. Mi pregunta ahora es: ¿refleja twitter el sentir general de la calle?
Tengo amigos y conocidos que piensan de una manera diametralmente opuesta a la mía y no nos vamos insultando por la vida. Defendemos nuestras posiciones de forma más o menos vehemente pero sin llegar al insulto ni a la descalificación. Sin embargo a veces me sorprendo viendo noticias de gente que ha atacado violentamente a otro por una mera discusión de tráfico.
¿Nos están volviendo las redes sociales más individualistas y egoístas y menos empáticos?
¿Vivimos en nuestra burbuja de Netflix, persianas que se activan con la voz y no somos capaces ni de mirar a la cara al vecino cuando nos cruzamos con él en la escalera porque estamos contestando un whatsapp?
A mí las redes sociales me han dado mucho, como un maravilloso reencuentro con mis compañeros del instituto, conocer a gente que amaba la misma música que yo o hacer amigos que serán para siempre en foros de intereses comunes. Pero eso fue hace demasiado tiempo y cada vez me funcionan menos para hacer amigos.
¿Qué opinais vosotros? ¿Las redes sociales os ayudan a hacer amigos o por el contrario creéis que fomentan el odio?